Combate el envejecimiento tomando ácido hialurónico de fácil absorción

La búsqueda de la eterna juventud siempre ha suscitado gran curiosidad en la historia de la humanidad. Los mitos antiguos se revisten de figuras y leyendas como “el elixir de la vida” o “la fuente de la juventud”, símbolos de la inmortalidad, como ejemplos del afán del hombre por desafiar al tiempo. En la sociedad actual se impone más que nunca la necesidad de poseer una apariencia joven, existiendo un miedo cada vez más generalizado a envejecer mal y una tendencia a ocultar los vestigios de la vejez, en contraste con el aumento en la esperanza de vida.

A pesar de todos los esfuerzos, la realidad es que no existe ningún milagro para detener el inevitable paso de los años para todos. Sin embargo, sí podemos suavizar de manera natural sus efectos en el organismo, tanto los que se ven como aquellos que no se ven, y contribuir así a ralentizar dicho envejecimiento.

En AORALIFE nos gustan las propuestas más efectivas, pero a la vez menos invasivas para conseguirlo. Por eso creemos que algunos compuestos, unidos y utilizados en el tiempo, pueden lograr efectos visibles y positivos tanto en nuestra piel como en el estado de ánimo, aumentando nuestra vitalidad.

Hoy vamos a hablaros del ácido hialurónico, muy de moda en las últimas décadas, y también de sus beneficios visibles a partir de su ingesta diaria.

¿Qué es el ácido hialurónico?

Es una molécula presente de manera natural en nuestro organismo, en concreto en la epidermis y en diferentes tipos de mucosa que actúa como componente en las células de los tejidos. Ayuda a absorber y transportar sus nutrientes básicos y elimina los residuos generados en ellas.

Para que os hagáis una idea, el cuerpo humano contiene alrededor de 15 gramos de ácido hialurónico (en una persona de unos 70 kg), de los cuales 5 gramos al día se reciclan a través de diferentes vías. Como curiosidad es importante destacar que las personas tenemos el contenido de ácido hialurónico al más alto nivel durante nuestro período de embrionario, nivel que va disminuyendo gradualmente después del nacimiento. Si suponemos que el contenido de AH en el cuerpo humano a los 20 años fuera del 100%, podría disminuir a un 65%, 45% y 25%, respectivamente, a los 30, 50 y 60 años.

El mecanismo de acción principal de las cadenas de ácido hialurónico es la absorción de agua para mantener un nivel óptimo de hidratación en los tejidos. Con el paso del tiempo, se va perdiendo esta capacidad de absorción del agua y disminuye de forma paulatina la producción de ácido hialurónico, por lo que la piel se deshidrata, se reseca y va perdiendo volumen favoreciéndose así la aparición de las arrugas.

¿Cómo actúa el ácido hialurónico en la piel?

El ácido hialurónico, precisamente como potente molécula que atrae el agua, cumple con una serie de propiedades que lo hacen único en su relación con la piel:

· La hidrata.

· Proporciona firmeza y suavidad (gracias a la lubricación de las fibras de colágeno).

· Ejerce de barrera defensiva (capacidad de impedir el movimiento de ciertos patógenos).

· Da estabilidad mecánica a las articulaciones.

· Retrasa su envejecimiento.

Conclusiones y Filosofía AORALIFE

Está demostrado que ingiriendo cantidades diarias de ácido hialurónico de bajo peso molecular (capaz de absorberse en el estómago y pasar a la sangre), una vez distribuido por los tejidos, se encuentra disponible para la piel de manera inmediata. Así actúa como si fuera una barrera protectora y un mecanismo natural para frenar la aparición de las arrugas.

Como en AORALIFE nos gusta hablar con propiedad, en este caso específico nos basamos en diferentes estudios científicos que demuestran esta óptima biodisponibilidad y la buena absorción por el intestino delgado del ácido hialurónico de bajo peso molecular.

Este componente, junto a otros que os explicaremos en muy poco tiempo, es un importante aliado para conseguir nutrir la piel desde el interior y lograr un efecto antiarrugas siempre de manera natural, menos invasiva que otros tratamientos y de fácil uso.