¿Cómo regenerar la piel después de los excesos del verano?

Después del verano tenemos que regenerar la piel tras la exposición prolongada a los rayos del sol, los baños en el mar, los paseos por la montaña y otro tipo de excesos inconfesables.

Son actividades muy agradables que nos vienen de maravilla, pero si notas tu piel muy tirante o te descubres nuevas arrugas es el momento de poner remedio y frenar un posible envejecimiento prematuro.

¿Te parece bien?

5 claves para recuperar y regenerar tu piel 

En Aora Life siempre decimos que, si quieres cuidarte correctamente obtendrás mejores resultados y más duraderos si te nutres desde el interior, de ahí que te ofrezcamos una amplia gama de nutracéuticos para regenerar tu piel después del verano.

Nuestro antiarrugas natural es el mejor aliado. Ni te lo pienses.

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Está bien que te hayas preocupado por hacerte un neceser con los tratamientos más exclusivos para el cuidado facial, pero antes debes mantener la higiene adecuada.

1. Usa toallas faciales de algodón orgánico

A menudo solemos quitarnos el maquillaje con tisúes o algodones desechables. Pues bien, hay una alternativa buena para ti y también para el planeta.

Si utilizas toallas pequeñas de algodón orgánico las podrás usar tantas veces como lo necesites y no generas mayor residuo.

Asegúrate de lavar tu toallita después de cada uso y de que el tejido sea extra suave para que tu piel no sufra.

Todos los demás utensilios que nos ayudan a limpiar la piel como cepillos, esponjitas o algodones deben estar igualmente higienizados.

2. Revisa el estado en el que están tus cremas

Es paradójico que estemos tan pendientes de las fechas de caducidad de lo que comemos y casi no prestamos atención a nuestras cremas.

Las mascarillas, lociones, aceites, desmaquillantes, cremas, etc. abarrotan nuestro baño y no todos los tarros los usamos al completo.

regenerar la piel

Cuando compramos no solemos mirar el tiempo de uso que sugiere cada laboratorio y es fundamental que cosméticos, cremas y demás productos de belleza se encuentren en buen estado si no quieres tener un susto en forma de eccema, dermatitis u otro tipo de afección en la piel.

Es aconsejable guardar los productos de limpieza y maquillaje en un espacio fresco, seco y alejado de la luz y por favor… ¡No uses cosméticos más allá de la fecha de vencimiento!

3. Exfoliación semanal

Nos encantaría conservar el bronceado veraniego todo el año, pero no hay manera, ¿verdad?

Lo bueno es que para regenerar la piel no hay nada mejor que hacer un “barrido” de células muertas con un exfoliado a fondo y con ello, no solo vas a suavizarla, sino que vas a mejorar la circulación sanguínea.

Los exfoliantes a base de aceite son perfectos porque aportan una hidratación adicional, pero puedes elegir otros más intensos o delicados dependiendo de cómo sea tu piel. Si tienes dudas consulta con los expertos.

Recuerda que no debes abusar de la exfoliación. Una vez por semana es suficiente.

4. Protección diaria

El clima nos afecta a todos los niveles, pero el frío puede enrojecer y resecar tu piel provocándote mucha incomodidad. Si notas tu cara reseca debes nutrirla inmediatamente y usar protección adicional especialmente en pómulos y labios.

Si te acostumbras a usar una hidratante de día y otra de noche tendrás mayor protección. También puedes llevar un bálsamo labial para esos días extremadamente gélidos.

regenerar la piel labios

Elije fórmulas enriquecidas con vitamina E y otro tipo de aceites naturales que sean calmantes y no te olvides de proteger también tu cabello que se resiente mucho con los cambios de estación.

Revisa la guía definitiva para el cuidado de la piel y descubre lo mejor para lucir una piel tersa.

5. ¿Quieres controlar el nivel de humedad? 

Si eres urbanita y no vives cerca de la costa es muy difícil controlar el nivel de humedad y la cosa se complica mucho más cuando llega el momento de encender la calefacción.

Por eso, el humidificador parece que se está convirtiendo en el nuevo must de belleza porque no solo hidrata tu piel, sino que mantiene un nivel de humedad estable en el ambiente y eso impide que los virus y las bacterias se transporten con facilidad.

Aunque la creación de esa suave bruma sea el objetivo de estos aparatos no confundas un humidificador con un difusor (para aceites esenciales) o un purificador que limpia la polución del aire.

Los humidificadores son dispositivos que se usan en espacios cerrados como tu casa o tu oficina y consiguen que tu piel se vea menos reseca y tirante.

Ahora ya sabes que la fórmula perfecta sería nutrirte desde el interior con una dieta saludable, hidratándote, manteniendo una higiene adecuada, controlando la humedad y tomando Aora Antiaging para ayudar a regenerar tu piel después del verano.

No es tan complicado.

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